Billie
Por: Gabriela Del Reyo
Esta semana se llevaron a cabo los Billboard Music Awards, en los cuales Billie Eilish obtuvo 12 nominaciones ganando 3 como “Mejor Artista Nuevo”, “Mejor Artista Femenina”, y “Mejor Álbum en el Top 200” por su álbum debut When We All Fall Asleep, Where Do We Go?”; además, fue la única en portar cubrebocas durante toda la premiación.
Sin embargo, la noticia de esta semana sobre ella no fue respecto a sus premios. Tanto en redes sociales como en revistas, circulan fotos de ella vistiendo un top de tirantes y shorts que fueron tomadas por un paparazzi cuando Billie salía de su casa dirigiéndose a su auto, y en consecuencia, los comentarios ejerciendo body shaming abundaron. Desde el inicio de su carrera, Billie Eilish ha sido muy atacada en diferentes aspectos, y lamentablemente lo mismo ha pasado y sigue pasando con otras artistas.
En primer lugar, retomando el punto anterior, Billie siempre se ha caracterizado por usar ropa baggy. Esto además de hacerlo por comodidad, estilo y gusto, es una forma de evitar comentarios sobre su cuerpo, sobre todo para que se concentren más en su música que en su físico. Aún así, muchos la han atacado por no ser lo “suficientemente sexy”, pero años atrás, cuando también salieron a la luz fotos de ella vistiendo falda, los hombres no tardaron en sexualizarla aunque era menor de edad. Ahora es atacada por su peso cuando apenas tiene 18 años, dejando de lado su talento y su éxito, siendo reducida sólo a su físico.
Lo mismo pasó con Taylor Swift y Adele. A Taylor Swift la juzgaban por ser delgada y decían que estaba “plana”, mientras que con Adele todos enloquecieron cuando subió una foto en Instagram con un aspecto mucho más delgado, como si fuera un mayor logro perder peso que componer canciones dignas de un Oscar y varios Grammys, además de tener una voz maravillosa.
Las mujeres somos reducidas a nuestro físico, especialmente dentro de la industria del entretenimiento. Es por esto que Madonna tiene que seguir con dieta y ejercicios rigurosos y bailar en tacones a sus 60 años de edad, o Jennifer López tiene que salir casi desnuda en el medio tiempo del Super Bowl, mientras que U2 o Paul McCartney, sin importar su aspecto o vestuario, sólo con tomar el micrófono recibirán elogios y todos dirán que hicieron el mejor espectáculo de la historia, y nadie pondrá en duda su talento.
En segundo lugar, muchas personas ponen en duda si en verdad ella merece todo el éxito y los premios que ha obtenido. Muchas personas creen que Billie lo ha conseguido todo por medio de contactos, ya que nació en Los Ángeles y sus padres también son artistas. Esto es en gran parte falso desde el punto de donde se toma.
Sus padres, Maggie Bird y Patrick O’Connell, son en realidad artistas no reconocidos. No es como que Billie y Finneas (su hermano) formaran parte de una dinastía al estilo DiCaprio o West; por lo mismo sufrieron algunas carencias, y de hecho no fueron a la escuela. Maggie y Patrick les enseñaban las materias tradicionales en casa mientras les inculcaban el amor a la música y otras artes desde muy pequeños. Es importante añadir que la educación en Estados Unidos es muy cara, especialmente a nivel universitario, por lo que hubiera sido muy complicado que alguno de los dos fuera a la universidad.
Posteriormente, Finneas actuó en pequeños papeles como en la serie Glee, mientras que Billie incursionaba en la danza hasta que se lastimó y ya no pudo cumplir su sueño de ser bailarina contemporánea, lo que llevó a ambos a enfocarse completamente en la música. El resto es historia.
Hay otros artistas a los que se podría juzgar con ese mismo argumento, como Julian Casablancas, quien es hijo del empresario John Casablancas, fundador de la agencia de modelos Elite Model Management. No obstante, no veo a nadie negar que The Strokes es una de las bandas más importantes del siglo ni decir que Julian no tiene talento; en realidad estoy segura que muchos desconocían esto y no les interesaba. Eso pasa regularmente en el arte y el entretenimiento.
Cuando los artistas son hombres se busca separar la obra de su vida, pero cuando se trata de una mujer es más importante su vida personal. Es por esto que para muchos Billie Eilish tuvo éxito gracias a los contactos de sus padres, Selena Gómez en realidad se hizo famosa gracias a Justin Bieber, Grimes es únicamente la novia y madre del hijo de Elon Musk en los titulares, y Kanye West hizo famosa a Taylor Swift.
Por último, Billie y otras artistas son criticadas incluso por su música. Algunos creen que ellas no componen y sólo son accesorios mercantiles, y cuando está comprobado que ellas escriben y muchas veces producen sus propias canciones, las califican como vacías, superficiales, ridículas, básicas, etc.
Mujeres como Billie, Lana, Taylor, Halsey, Rosalía, Grimes o Lizzo, además de componer sus propias canciones, han dirigido sus propios videos y exploran diferentes sonidos, esforzándose aún más con los años y con cada álbum o single que sacan, a la vez que tienen que enfrentarse con una estructura que busca cuestionar y demeritar su trabajo… Sin embargo, son ellas quienes están sosteniendo e innovando la industria musical, al mismo tiempo que siguen abriendo las puertas para las futuras generaciones e inspiran a mujeres de todo el mundo con su música.
