HOMBRES FEMINISTAS
Por Flores Hernández Elsa Guadalupe
y Mata Hernández Sandra Melisa
Existe una problemática constante con los hombres que se autonombran ¨aliados¨ de la lucha feminista, los cuales pretenden transmitir a las demás personas que ellos entienden la opresión histórica que carga la mujer, y son tan "empáticos" con nuestras heridas que es por eso que se atreven a debatir respecto a la teorización que existe y proponen también qué debería de hacer el movimiento, terminan por tergiversar las ideas feministas a su favor, acercándose a mujeres que comienzan a adentrarse en el feminismo para transmitirles la idea que ellos tienen de las diferentes teóricas feministas, a menudo solo de las que les traen algún beneficio, planteandoles una falsa idea de liberación sexual y aprovechándose de la confianza que las mujeres depositan en un hombre que aparentemente jamás las vulneraría. Las mujeres tenemos que entender que nuestros conocimientos son valiosos e importantes, que el sujeto político del feminismo son las mujeres y que el feminismo es meramente para nuestra liberación del sistema patriarcal.
¿Qué hay de malo en todo esto? El movimiento feminista es por y para las mujeres, eso debe quedar claro para todas nosotras, ya que por muy aprendido que tengan el discurso estos hombres solo queda en eso: en un discurso, pues no lo han vivido en carne propia y tampoco cuestionan sus violencias, quedando estas evidenciadas cuando alguna de nosotras se las hacemos notar. El feminismo no es una lucha de hombres contra mujeres, nosotras vamos contra toda una historia que nos ha silenciado, matado, golpeado, violado, vendido y quemado vivas, pues no importa qué sistema económico exista siempre se ha normalizado nuestra sumisión. Pero hay que dejar claro que el hombre, también con su carga histórica, siempre ha sido beneficiado y enaltecido por el mismo sistema: el cual le permite la reproducción de la violencia ejercida hacia nosotras, paralelamente esto da pie para ir escribiendo como debemos ser tratadas haciendo que nosotras mismas reproduzcamos estas violencias hacia las mujeres que nos rodean.
Estos hombres feministas a favor de nuestra lucha solo buscan la aprobación necesaria para inmiscuirse una vez más en la organización que estamos llevando acabo las mujeres, no logran dimensionar la red que estamos tejiendo entre nosotras que nos abraza lo más posible, nos sana y nos construye a tal grado que sale sobrando su presencia ¨masculina¨ en nuestras vidas, la socialización de los hombres hace casi imposible la idea de que exista un movimiento que no sea para su beneficio y sobre todo que no se requiera de su participación.
A menudo su presencia dentro del movimiento y de nuestras espacias terminan vulnerando lo que tanto nos ha costado recuperar y construir. En multiples escenarios la inclusión de ellos ha sido un completo fracaso, pues si debiera ser un lugar donde como mujeres nos sintieramos cómodas, en realidad es un espacio donde sigue existiendo el menosprecio, agresión e intimidación.
El papel de los hombres no es dentro del movimiento feminista, tampoco enseñando o teorizando feminismo. Para que realmente aporten algo necesitan dejar de violarnos, asesinarnos, acosarnos, necesitan dejar de aprovecharse del papel que el patriarcado les ha brindado, necesitan dejar de aprovecharse de los cuidados gratuitos de las mujeres que tienen a su alrededor, dejar de menospreciar a sus compañeras de clase, dejar de encubrir y justificar a sus amigos abusadores. Los hombres necesitan preocuparse por eliminar sus conductas patriarcales, misóginas y machistas; no necesitan hacerse voceros del movimiento feminista. Por más teorizado que esté el macho, no deja de ser macho.
