Falsa propaganda
Por Bruno Rico Gómez.
En varias columnas he mencionado el efecto de la publicidad en la vida diaria de la sociedad y el cómo esta afecta en cada una de las personas a las que llega por los diferentes medios.
Bueno, como todos saben justo ahora estamos en temporada de elecciones, por lo que la publicidad juega una parte muy importante de toda la carrera durante esta época, por esta razón el comprender como los spots, panfletos y mantas juegan con el subconsciente de todos es de alta importancia.
Sean del partido que sean, la cantidad de dinero utilizado para propaganda cada 3 años es una cifra enorme que se reparte entre todos los participantes y que lamentablemente solamente se dirige a productos de un solo uso que son fabricados principalmente con plásticos que no terminan de degradarse en 100 años.
Sobre todo, la propaganda física es la más contaminante, no solo de México sino que de todo el mundo y aunque muchos partidos están optando por hacer campañas digitales estas medidas no han logrado reducir el impacto de todas las elecciones pasadas. Encima de todo esto, los murales que se pintan en todas las ciudades solo termina siendo contaminación visual.
Cuando uno está viendo videos en YouTube siempre se harta de todos los comerciales de Kwai o TikTok y ni se digan de los que duran más de 5 segundos. Ahora resulta impresionante que los spots políticos terminen en nuestros muros de Facebook, Instagram y Twitter pero no es de sorprenderse ya que tanto los partidos como los candidatos buscan llegar hasta la intimidad de nuestra casa para controlar la decisión durante las elecciones.
El bombardeo mediático no tiene otro propósito que no sea el dirigir a la mayoría de la población a un lado o al otro pero tenemos que recordar que todo esto va más allá de un concurso de porras pues este tipo de eventos determinara quienes serán nuestros representantes en el gobierno y sobre todo ellos son lo que decidirán que es bueno o malo en nuestras calles.
Recordemos que los políticos no son más que otros ciudadanos y son los que deben de darnos cuentas pues viven de los impuestos que pagamos, también hay que recordar que son personas comunes que sangran y que cagan por esto tenemos que dejar de endiosarlos e idolatrarlos.
Como ciudadanos debemos conocer nuestros derechos y obligaciones, por esta razón quise escribir esta columna pues es momento de que la sociedad se levante a exigir y cumplir con su voto libre y seguro para que nadie pueda sobrepasar estos derechos que se han ganado con esfuerzo de miles de personas en toda la historia mexicana.
Recuerden que hay que ser críticos y serios al analizar cada uno de los participantes para las elecciones de este año, hay que comparar seriamente cada uno de los planes y aunque soy fiel creyente de que la gente puede cambiar a los postulados hay que revisarles su pasado para que no nos toquen las sorpresas a nosotros.
“El precio de desentenderse de la política es el ser gobernado por los peores hombres”
- Platón.
