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La sororidad no está en cuarentena

Por Ankaret Alfaro

Toda la semana me he levantado extrañando a mis amigas, en poco tiempo logré construir una relación hermosa basada en el amor y  empatía con cada una de ellas. Ellas me enseñaron lo indispensable que es crear redes de comunicación y apoyo, y es así como me hacen sentir totalmente segura, protegida y cuidada, aunque no estemos cerca, aunque estén en cuarentena.

La pandemia del COVID-19, ha obligado al gobierno a tomar medidas de contención, oficialmente algunos lugares de entretenimiento y diversión donde suele haber gran afluencia han sido obligados a cerrar, las escuelas han optado por dar clases en línea, y algunes trabajadores pueden trabajar desde casa. Y en éste caso me pregunto ¿Qué pasará con las mujeres que viven violencia doméstica? ¿Qué pasará con las mujeres que viven y dependen de su agresor? Su integridad y sus vidas corren mucho más riesgo que estando fuera.

Soy consciente de que lamentablemente muchas mujeres a pesar de poder tener el privilegio laboral o educativo de permanecer dentro de sus casas por la situación de emergencia sanitaria que vivimos, no se sienten seguras, muchas viven con su agresor y de hecho, podrían correr más peligro encerradas,  para muchas la tensión en el hogar y la convivencia forzada significa vivir una violencia insoportable y para quienes se encuentran en situación de aislamiento el riesgo aumenta.

Esto es un recordatorio de que nuestra lucha no está en cuarentena, y que lamentablemente la violencia machista tampoco, y que aunque los medios se saturen de noticias sobre el COVID-19 y no sigan cubriendo de la misma manera noticias sobre mujeres que a diario siguen siendo asesinadas por familiares o pareja, significa que de repente esas diez mujeres asesinadas a diario ya no existen. Al contrario, no dejemos que la problemática se invisibilice, no dejemos de nombrarlas, porque es una problemática que se suma a la actual situación de contingencia, entonces debemos cuestionarnos sobre la seguridad que nos brindan y la eficacia de los protocolos en caso de necesitar ayuda y plantearnos cómo queremos que éstos funcionen para mantenernos a salvo y prevenir, controlar y minimizar estos riesgos de violencia.

Crear redes como herramienta de lucha es indispensable para brindar apoyo a quienes pasan cuarentena con agresores o potenciales agresores, la empatía y la sororidad son necesarias, debemos mantenernos comunicadas y evitar lo más posible el aislamiento, que nos tenemos que hacer más presentes y hacer ver que ni en ésta situación tan terrible dejamos de amarnos, que no nos olvidamos las unas a las otras y estamos siempre para cuidarnos, ayudarnos y protegernos.

La lucha no está en cuarentena, no estás sola, mantente siempre en contacto, si te sientes en peligro o conoces a alguien que podría estarlo marca al número de emergencia o contacta con alguna colectiva u organización que pueda ayudarte lo más pronto posible.

Les mando un hilito de aliento, mucha fuerza y un abrazo sororo.

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