Grandes proezas de la humanidad pt. 1

Por Bruno Rico Gómez

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En esta nueva serie les hablare sobre grandes construcciones, estructuras e inventos que el humano ha creado en su existir, ¡vengan conmigo que sé que este viaje les va a gustar!

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El Istmo de Panamá ha sido sitio de estudio marítimo y mercantil por siglos, desde el siglo XVI los españoles habían tratado de establecer una ruta mercantil a través de los canales de este Istmo y no fue hasta 1903 que el gobierno de Estados Unidos firmo un tratado de la mano de Panamá para la construcción de un canal para establecer una ruta concreta. En 1904 Estados Unidos compro la empresa del Canal de Panamá por 40 millones de dólares y a este proyecto del inyecto 387 millones de dólares a lo largo de diez años.

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Pero la construcción de este canal presentaría varios problemas, entre ellos la ingeniería, el saneamiento y la organización. La culminación y duración de este proyecto se adjudica a John F. Stevens, George W. Goethals y Williams C. Gorgas. El principal problema que deberían de enfrentar en la construcción del canal son las diferentes altitudes de la cordillera continental a lo que el cuerpo de ingenieros propuso una idea nunca antes pensada.

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Imaginen tres peceras que están a tres alturas diferentes y quieren que de alguna manera un barquito suba de la base hasta la última, la solución de los ingenieros fue crear represas que se accionaran por tiempos, o sea, nuestra primer pecera se llenaría con agua de la segunda y alcanzaría el nivel de la segunda, se cierra la compuerta y se llena esa presa para que después se repita el paso con la tercer pecera y se pueda llegar hasta la cima de las peceras. Una idea sencilla pero que llevada a la vida real seria extremadamente cara. Este mecanismo esta descrito en la imagen de portada de la columna.

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El proceso consto de cortar la cordillera y construir lo que en su tiempo fue las compuertas más grandes jamás construidas y así crear el sistema de canal de esclusas más grande del mundo. Fue hasta 1977 que E.E.U.U. y Panamá se asociaron para la administración, mantenimiento y operación del Canal de Panamá firmando dos tratados en Washington. El Canal debía ser operado hasta el final del siglo bajo arreglos diseñados para fortalecer los lazos de amistad y cooperación entre los dos países. Los tratados fueron aprobados en Panamá en un plebiscito el 23 de octubre de 1977 y el Senado de los Estados Unidos dio su aprobación y consentimiento para su ratificación en marzo y abril de 1978. Los nuevos tratados entraron en vigor el primero de octubre de 1979.

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La Comisión del Canal de Panamá, una agencia del gobierno de los Estados Unidos, operó el Canal durante la transición de 20 años que comenzó a partir de la implementación del Tratado del Canal de Panamá el primero de octubre de 1979. La Comisión funcionó bajo la supervisión de una junta binacional formada por nueve miembros. Durante los primeros 10 años del período de transición, un ciudadano estadounidense sirvió como administrador del Canal y un panameño era el subadministrador. A partir del primero de enero de 1990, de acuerdo con lo establecido por el tratado, un panameño sirvió como administrador y un estadounidense como subadministrador.

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Finalmente en el 31 de diciembre de 1999 Panamá toma control total del Canal de Panamá y hasta el día de hoy es controlado por La Autoridad del Canal de Panamá.

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Esta construcción ha sido un parteaguas en toda la extensión de la palabra pues tanto E.E.U.U. como otros muchos países se beneficiaron de este proyecto naval pues ahora los barcos no tenían que rodear todo el continente, sino que ya podrían cruzar sin problema alguno y así evitar gastos marítimos y náuticos excesivos.

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“Teníamos dos objetivos fundamentales en la Revolución del año 68. Primero, la recuperación del Canal y segundo, convertir una caricatura de país en una Nación.”

Omar Torrijos oficial del ejército panameño.