¿Dónde se ponen los brazos al dormir?

Miss Cosmic Trash

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De niña era muy fácil conciliar el sueño, cuando te asaltaba, podías acomodarte en cualquier sitio y dormir.

Pero cuando uno crece, el cuerpo parece ser ajeno a veces,

como si las peleas internas las diéramos contra un enemigo físico.

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De niña solía escuchar a mamá que decía:

“¿Cómo acomoda uno los brazos al dormir, pues?”

Es lo que más recuerdo de ella, ese conflicto que parecía un disparate.

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Al hacerme mayor, las noches asfixiaban mi sueño.

Mis extremidades superiores se volvieron rígidas, como las ramas de un viejo roble. Estos pedazos de concreto no se lograban moldear.

Parecía que mis brazos eran secciones independientes de mi cuerpo.

No lograba entender esta sensación de incomodidad que tenía al desconocer la forma de acomodar los brazos para dormir.

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Me levantaba de madrugada, quería deshacerme de ellos.

Al borde de la locura y con las manos ajenas atacándome, llena de insomnio en las ojeras, me arrojé a la cama.

Igual que la cabeza, que descansa sus ideas cómodamente sobre una base alta de la cama, mis brazos se acurrucaron y encontraron, por fin, su descanso

En ese momento entendí: los brazos también necesitan una almohada para dormir.

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Miss Cosmic Trash

@YunoHdz