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Tocando fondo

Por Bruno Rico Gómez.

En la semana se hizo publico el retiro del apoyo con fideicomisos a diferentes ramas de la ciencia, entretenimiento y arte y claro que esto hizo enojar a muchas personas en México. No es para menos, a través de estos fondos muchas investigaciones científicas, películas, exhibiciones y hasta preparaciones para desastres nacionales se ponen en juego pero yo aquí me pregunto ¿Hasta cuando la ciencia es útil para el ciudadano? ¿En realidad se producen buenas películas en México? ¿El arte esta a disposición de todos?

La principal problemática de los cuerpos estatales es la corrupción, no más no menos, esto siempre ha sido tema de discusión pues todos veíamos como robaban el dinero y nunca se hacia nada. Se tiene que decir que hay ciertas políticas instauradas por el gobierno actual que parecen sacadas de una caricatura pero este retiro de los fideicomisos lo aplaudo.

Como miembro de la comunidad universitaria he tomado clases con doctores, maestros y profesores altamente preparados y que tienen grado de investigadores en la UAM, la principal molestia de ellos ha sido la falta de material, los pocos laboratorios que hay y la falta de fondos para los investigadores en la UAM, al menos en las carreras de ingeniería. Como ingeniero he ocupado muchas herramientas, al igual que muchos compañeros de otras áreas, para acceder a las investigaciones o libros que nos piden los docentes y es aquí donde uno se pregunta ¿Hasta dónde llega la ciencia? ¿La ciencia tiene un fin lógico y objetivo? ¿El dinero de las investigaciones está bien dirigido?

Los alcances de la ciencia a la fecha son enormes, tan enormes que todo lo que vemos, sentimos y hasta olemos es descrito o creado por la ciencia. Si bien todo es ciencia, la de los investigadores es tratar de explicar hipotesis mediante el método científico pero esto ha llegado a extremos que parecen insignificantes. Con el riesgo de sonar absurdo, la búsqueda de la ciencia especifica carece de sentido real en la vida común, o sea, las investigaciones que son realizadas con ambientes controlados no cumplen con las reglas de la naturaleza. Para mi este tipo de investigaciones solo son la búsqueda egoísta y desesperada de aprobación y reconocimiento por investigadores y agencias exteriores.

Pero afuera del sentido y dirección de las investigaciones, la verdadera pregunta es ¿Cuánto dinero se destina a investigaciones con un fin público, social y real? No tengo un número para esto pues no hay una lista oficial de las mismas. ¿El gobierno mato a la ciencia? Probablemente, pero es un bien necesario para erradicar de una vez toda la corrupción dentro de estos fondos si es que se llega a aplicar de manera correcta.

Al igual que las investigaciones científicas, el FIDECINE sufrirá de estos recortes y aunque no es mi rama en la revista ya que estoy tocando el tema me gustaría cubrirlo aquí. El cine mexicano ha sido criticado duramente a través de estos últimos 20 años, no es para menos, con películas de trama sencilla, repetitivas y de cierta manera hasta estereotípicas la critica no ha dejado de lloverles a los directores mexicanos, pero ¿en verdad el cine mexicano apesta? No, porque hay películas, series y hasta caricaturas mexicanas creadas con bajo presupuesto que han hecho sobresalir a México en todo el mundo, aunque lamentablemente estas no tienen acceso al dinero del FIDECINE y por consecuente tienen que ser financiadas por los mismo directores o por inversores privados. Entre las problemáticas del fondo de investigaciones y del FIDECINE no hay mucha diferencia, suelen darle dinero a producciones que no merecen ser financiadas mientras que otros proyectos que realmente podrían en alza al cine nacional son ignorados fríamente.

El fondo retirado más polémico fue el fondo de desastres nacionales, que a simple vista parece una locura quitarlo, pero aunque parezca increíble ese también esta plagado de corrupción, si tengo algún lector que haya vivido aquel fatídico 19 de septiembre de 1985 recordara lo que hizo el gobierno con la ayuda de la cruz roja acerca de la ayuda que llego de los países extranjeros. Así es, con el dinero del fondo de desastres se movilizaron miles de productos enviados desde el extranjero al país y se acomodaron en almacenes que después serian descubiertos.

Como podemos ver la corrupción esta dentro de lo que nos entretiene y hasta de lo que se supone que debería de rescatarnos en caso de desastres, es por esta razón que las políticas utilizadas para la revocación de estos fondos tienen que ser directas y tajantes, solo nos queda esperar que el gobierno haga las cosas bien con ese dinero, que este bien canalizado y que se utilice para bien y si no es así debemos recordar que como ciudadanos mexicanos estamos en todo derecho de exigir cuentas a nuestros gobernantes.

“Muchísima gente se ha vuelto pesimista por financiar a optimistas.”

C.T. Jones, contador británico.

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