“PINCHES NINIS”
La llegada de la izquierda al poder a través de la figura de López Obrador vino con un aire de cambio, apoyado por diversos sectores como el estudiantil, el artístico, los sectores menos favorecidos económicamente y las clases medias precarizadas, uno de los programas más ambiciosos y que más revuelo han causado entre la población desde que se anunció su implementación es “jóvenes construyendo el futuro” un programa de becas y apoyo económico que ofrece el gobierno para gente de entre 18 y 30 años de edad, un programa que no ha sabido explicarse entre la población y que suele reducirse a “becas para ninis”, para comprender el programa y el por qué resulta no solo necesario sino deseable es necesario explicar el concepto de “nini”.
La palabra “nini” hace alusión a la gente que no estudia y no trabaja, comenzó como una forma de encasillar una realidad social de los jóvenes y con el uso constante y el paso del tiempo fue perdiendo su terminología de estudio para convertirse en un despectivo, hoy el ser llamado “nini” produce un efecto de impacto psico-social amplio y denigrante para el que lo recibe, a menudo en México se suele acompañar de palabras aún más violentas y despectivas como “huevon, inútil o estúpido” es decir, el día de hoy el “nini” carga con una cruz social que es meramente una condición.
El programa del gobierno “jóvenes construyendo el futuro” busca reducir estos ataques contra la juventud que se han hecho no sólo entre sus iguales sino de manera sistemática desde el poder, el Gobierno federal cree haber encontrado una forma no sólo de acabar con esta condición que condena a más de 7 millones de jóvenes sino de engrosar las fuentes de trabajo formal y de fuerza laboral, la ecuación del gobierno resulta un tanto sencilla, si el problema son las escasas oportunidades de los jóvenes para estudiar o trabajar hay que crear más universidades y más empleos, para esto nace el programa, una iniciativa de dos vías que nos presenta una opción estudiantil para jóvenes universitarios y una modalidad de capacitación pagada para empleados. Los universitarios pueden solicitar una beca de 2.000 pesos bimestrales mientras los que opten por las opciones de capacitación se integran a una empresa participante para laborar por un año con lineamientos que tratan de evitar el ausentismo en el trabajo y en el cual obtienen un pago de 3.500 pesos al mes que corre por el gobierno, de este modo apoyamos el estudio y el trabajo juvenil erradicando a los ninis. No obstante la llamada austeridad republicana ha causado recortes en sectores importantes como el artístico y la educación, esto, aunado al poco entendimiento del programa ha causado entre la población cierto aire de malestar, se cree que a las personas se les ofrece una beca por no hacer nada y para fomentar la creación de condicionantes que a largo plazo generan pobreza.
Uno de los sectores más críticos para con el programa ha sido el sector deportivo,quienes han sufrido una herencia de abandono administrativo por parte de gobiernos pasados que no se ha sabido revertir y un recorte en la administración actual y que se encuentra a cargo de la ex medallista olímpica Ana Gabriela Guevara, los deportistas que están inscritos en la CONADE no han dudado en ejercer su crítica de manera fría y desentendida de la situación ya explicada aquí mismo, tenemos el caso de Nabor Castillo, el judoca comentó que es denigrante que un nini obtenga una beca mayor que él que es deportista, también es común escuchar entre la ciudadanía comentarios en este sentido: “no es posible que se recorte dinero en x dependencia y se le de dinero a la gente que no hace nada”, debemos entender que los recortes pueden y deben ser cuestionados pero las becas y el programa integral de “jóvenes construyendo el futuro va mucho más allá de regalar dinero”, 7 millones de jóvenes se han visto relegados y privados no sólo de sus estudios a nivel superior sino apartados y excluidos de la vida laboral, las empresas han utilizado el pretexto de que no les alcanza el dinero para cubrir la nómina de la naciente fuerza laboral y es por esto último que el gobierno cumpliendo una de las obligaciones estatales más sagradas, como lo es la creación de empleos ha optado por absorber el gasto del primer año de trabajo de los jóvenes en las empresas privadas para que el empresario se comprometa a capacitarlos y a contratarlos por un lapso de igual tiempo en un futuro con un sueldo igual o superior al ofrecido por el gobierno.
Desde esta columna y este medio quiero dejar en claro que los deportistas tienen todo el derecho e incluso la obligación moral de cuestionar y criticar a sus autoridades, les doy mi personal apoyo y respaldo pero no creo que sea a costa de 7 millones de jóvenes que deban obtener recursos, los deportistas se esmeran y dedican a su deporte en cuerpo y alma pero poder hacer eso en México los pone en una situación de privilegio que 7 millones de personas no tienen, la vida deportista brinda frutos a todos aquellos grandes esfuerzos que se hacen y uno de ellos es la oportunidad y opción de buscar patrocinios de empresas privadas que fomenten y apoyen su carrera, no quiero decir con esto que el estado esté exento de su responsabilidad pero insisto en empatizar y comprender la realidad que viven nuestros compañeros generacionales, aquellos que no habían podido acceder a un trabajo o que han visto en riesgo sus estudios por falta de dinero.
A la ahora oposición les pido que dejemos de trivializar las problemáticas sociales, dejemos de creer que la política es un juego sencillo y frío que podemos reducir a meros números, son vidas humanas, son personas las que están en juego, la posibilidad de tener 3,500 pesos mensuales no van a sacar a una persona de la pobreza pero es que no se trata de números, se trata de darle la posibilidad a un joven de obtener trabajo y de obtener experiencia para entrar al mundo laboral, nadie ha propuesto dar becas a cambio de nada sino dar “oportunidades”, esa palabra <oportunidades> es la palabra que define este sexenio, dar oportunidad a quien no la ha tenido, a quien se la han arrebatado, a 7 millones de jóvenes que nosotros por acción u omisión convertimos en “ninis” por no desear darle la oportunidad de demostrar sus destrezas, habilidades y deseos, es momento queridos conciudadanos de abrirnos a la idea de que ellos tengan oportunidades de crear, de creer y de crecer, la batalla contra la pobreza es dura, larga y cansada pero darle la oportunidad a quien no la ha tenido va a traernos a todos grandes beneficios.
E.R.C.H. 25-7-2019
